La posible relación entre la menopausia y un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama es un asunto que genera una lógica preocupación entre las mujeres que afrontan este periodo de su vida. Aprovechando la celebración del Día Mundial de la Menopausia y el Día Mundial del Cáncer de Mama, que se celebran el 18 y 19 de octubre, respectivamente, vamos a despejar las principales dudas sobre su relación.

 

¿La menopausia causa cáncer de mama?

La menopausia no causa cáncer de mama, pero se trata de un periodo en el que confluyen varios factores que incrementan su riesgo.

El primero de estos factores es la edad: conforme se envejece, aumenta el riesgo de cáncer, y la mayoría de los tumores mamarios se diagnostican a partir de los 50 años.

El segundo factor tiene que ver con la exposición a los estrógenos y la progesterona, hormonas producidas por los ovarios e implicadas en el desarrollo de las características sexuales femeninas: desarrollo de las mamas, ciclos menstruales, embarazo…

La mayoría de los tumores de mama son hormono-dependientes, es decir que dependen para su crecimiento de estas hormonas femeninas, principalmente los estrógenos. Por lo tanto, cuanto más expuesta esté una mujer a los estrógenos a lo largo de su vida, mayor será el riesgo de cáncer de mama.

Este aumento a la exposición a estrógenos puede deberse al uso de medicamentos pero también a causas naturales. Por ejemplo, están más expuestas las mujeres que tienen más ciclos ovulatorios, como las mujeres que empiezan a menstruar a una edad más temprana o llegan a la menopausia a una edad tardía; las que son más mayores cuando tienen su primer embarazo o que nunca han dado a luz. De hecho, dar a luz es un factor protector del cáncer de mama. También hay enfermedades, como la obesidad, que aumentan la producción de estrógenos.

En conclusión: todo lo que exponga a la mujer durante más tiempo de lo necesario a los estrógenos implicará un incremento del riesgo de cáncer de mama.

 

La importancia de las revisiones ginecológicas

Aunque el cáncer de mama es el tumor femenino más frecuente, también es el que tiene mejor pronóstico y mayores tasas de curación gracias a la prevención y a la detección temprana.

Por ello, es fundamental que acudas a todas tus revisiones ginecológicas anuales para detectar de manera precoz cualquier indicio de cáncer de mama o de otras posibles patologías ginecológicas. En el Centro Médico Sanchinarro cuentas con profesionales con amplia experiencia para tus revisiones ginecológicas anuales.

 

Terapia hormonal sustitutiva y cáncer de mama

La menopausia puede causar una gran variedad de síntomas, pero no todas las mujeres los experimentan por igual. Mientras algunas apenas la notan, otras pueden presentar síntomas que afectan mucho a su calidad de vida e incluso son incapacitantes. La terapia hormonal sustitutiva tiene como objetivo compensar la pérdida de estrógenos en la menopausia y mejorar así sus síntomas.

La relación entre terapia hormonal sustitutiva y el riesgo de desarrollar cáncer de mama ha sido un tema muy controvertido durante muchos años, ya que mientras algunos estudios mostraban cierta relación, otros la desmentían.

Sin embargo, un meta-análisis realizado por investigadores de la Universidad de Oxford (Reino Unido), publicado en la revista científica The Lancet en 2019, ha permitido aclarar este controvertido tema que aún se sigue investigando. Este meta-análisis estudió los resultados obtenidos en 58 estudios en los que participaron más de 108.000 mujeres de una edad media de 65 años, la mitad de las cuales había recibido terapia hormonal sustitutiva para controlar los síntomas de la menopausia entre 1992 y 2018.

Los resultados mostraron que efectivamente existe una relación entre el uso de terapia hormonal sustitutiva y el desarrollo de cáncer de mama, pero que este riesgo depende tanto del tipo de medicación recibida (solo estrógenos, estrógenos y progesterona, administración diaria o intermitente…), como de la duración del tratamiento.

Dependiendo de la combinación de terapia hormonal sustitutiva utilizada, el riesgo de cáncer de mama aumenta entre 1 de cada 50 a 1 de cada 200 pacientes. Este riesgo puede ser el doble si el tratamiento dura más de 10 años, en comparación con las pacientes que lo reciben durante 5 años o menos. Por lo tanto, cuanto menor es el tiempo de administración, menor es el riesgo.

Un aspecto importante es que no se encontró ningún riesgo de cáncer de mama en las mujeres que recibieron tratamiento por vía vaginal, ya que no alcanza el torrente sanguíneo.

 

¿Significa esto que no se debe usar la terapia hormonal sustitutiva?

Los resultados de este estudio muestran una correlación entre el uso de la terapia hormonal sustitutiva y el cáncer de mama dependiente del tipo de medicación, forma de administración y duración del tratamiento.

Esto quiere decir que, para que la terapia hormonal sustitutiva sea administrada con la mayor seguridad posible, es muy importante seleccionar bien a las pacientes que realmente la necesitan, ya sean menopáusicas o con otras patologías en las que esté indicada, y que no pueden mejorar su situación mediante otro tratamiento. Asimismo, debe ser estrictamente prescrito, personalizado y controlado por el especialista.