Prevenir la infertilidad es un asunto que cada vez preocupa a más mujeres debido al retraso progresivo de la maternidad. Ante la pregunta de si se puede prevenir la infertilidad sólo cabe una respuesta: no, aunque con matices.

Salvo que la infertilidad se deba a una causa tratable, como por ejemplo un trastorno en los órganos reproductivos que pueda resolverse, la única manera de prevenir la infertilidad es evitando retrasar la maternidad más allá de los 35 años y, en su defecto, vitrificando los ovocitos para utilizarlos más allá de esa edad.

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¿Por qué el límite de los 35 años?

A partir de los 35 años disminuye drásticamente la reserva ovárica y la calidad de los ovocitos, lo que hace mucho más difícil conseguir un embarazo y llevarlo a término. A esto debemos sumar que las probabilidades de que el embrión tenga alteraciones cromosómicas, como la causante del síndrome de Down, también son mayores. En el hombre, la fertilidad también disminuye en torno a un 23 % cada año a partir de los 35 años, según la Sociedad Española de Fertilidad.

 

Vitrificación de ovocitos antes de los 35

Si estás cerca de los 35 años y quieres ser madre, pero no te parece el momento adecuado, es importante que consultes con tu ginecólogo y especialista en reproducción sobre la posibilidad de vitrificar tus ovocitos. De esta manera podrás utilizarlos para conseguir un embarazo más adelante.

Mediante el proceso de vitrificación, los ovocitos son tratados con sustancias crioprotectoras y se congelan en nitrógeno líquido hasta alcanzar los -196ºC. Los ovocitos vitrificados mantienen intactas sus propiedades y pueden utilizarse cuando lo desees. Aunque resulta fácil explicarlo, lo cierto es que se trata de un proceso complejo que debe llevarse a cabo con las máximas garantías de calidad y seguridad.

Por ello, en el Centro Médico Sanchinarro realizamos la vitrificación de ovocitos en el Hospital Ruber Internacional, que cuenta con la tecnología más avanzada.

Si quieres saber más sobre la vitrificación de ovocitos, no dejes de leer este artículo.

 

Otras causas de infertilidad

Aunque es un factor determinante, la edad no es la única causa de infertilidad.  En la mujer también pueden causarla algunos trastornos como la endometriosis, los miomas, problemas en las trompas de Falopio, anomalías en el útero y el cuello uterino, y las enfermedades oncológicas y de transmisión sexual, entre otras.

En el hombre, algunos factores que pueden causar infertilidad son los trastornos asociados a la calidad y cantidad del semen, o los problemas testiculares y en la próstata.

No obstante, las causas de infertilidad pueden ser muy variadas y no todas tienen tratamiento, por lo que es importante que el especialista haga un estudio exhaustivo.

 

Factores que influyen en la fertilidad y que puedes modificar desde hoy mismo

  • En el hombre, la obesidad afecta negativamente al volumen, movilidad y recuento de los espermatozoides. Además, pueden surgir alteraciones hormonales, como la disminución de los niveles de testosterona, asociada a la disfunción eréctil. En la mujer, el aumento de los niveles de estrógenos por la obesidad puede causar trastornos asociados a la infertilidad, como el síndrome de ovario poliquístico, ausencia de ovulación (anovulación) y trastornos menstruales. Para prevenir la infertilidad asociada a la obesidad, evita el sedentarismo, sigue una dieta sana y equilibrada, y haz actividad física todos los días.
  • El consumo de tabaco afecta a la morfología, calidad, concentración y movilidad de los espermatozoides; altera la producción de estrógenos en la mujer y acelera la pérdida de reserva ovárica. La tasa de infertilidad en mujeres y hombres fumadores es el doble que la de la población no fumadora, e incluso los tratamientos de reproducción asistida son menos eficaces en fumadores.
  • Estrés y ansiedad. Los estados de estrés y ansiedad pueden afectar a la calidad del semen y a la ovulación, haciendo que ésta no se produzca o que lo haga más tarde del momento previsto en el ciclo menstrual. Evita el estrés y la ansiedad practicando técnicas de relajación, haciendo deporte con regularidad y cuidando tu alimentación.
  • Enfermedades de transmisión sexual (ETS). La clamidia, la gonorrea, la sífilis, el virus del papiloma humano, el VIH…, por nombrar solo algunas ETS, pueden causar infertilidad en hombres y mujeres. Para prevenirlas, utiliza preservativo en las relaciones sexuales y evita las conductas de riesgo.